Ministeriales de Bacalar

Agentes ministeriales de Bacalar, en cumplimiento a orden de un juez de control

Bacalar, Quintana Roo, Febrero 23 del año 2018, Radiografía Quintana Roo.-Agentes ministeriales de Bacalar, en cumplimiento a orden de un juez de control, aprehendieron ese viernes a tres personas que con machetes en mano invadieron un predio ubicado en la carretera Bacalar-Pedro A. Santos, a orillas de la laguna.

Los hechos ocurrieron en el mes de septiembre del año pasado, cuando los ahora imputados ingresaron al predio denominado “La Piedra”, ubicado en el kilómetro 51+400 del tramo carretero federal Buenavista-Pedro A. Santos.

En ese lugar, llegaron repentinamente armados y sacaron con lujo de violencia a dos trabajadores que cuidaban el lugar y se apropiaron de bienes que se encontraban dentro del predio.

Se les vinculó a proceso y se les impuso como medida cautelar prisión preventiva, que se cumplió este viernes, en relación a la carpeta administrativa 203/2017, en agravio de Jayson Ray Bustillos.

Ramiro Ortiz Soto, comandante de la Fiscalía del Ministerio Público de Bacalar, señaló que no es el único caso que ha registrado de invasión en predios de la avenida costera, dada su alta plusvalía; sigue su curso una denuncia interpuesta en diciembre pasado con número FGE/QR/BAC/07/507/2017.

De acuerdo con la denuncia de Gustavo Rodríguez Elizarrarás, en julio del año pasado, fue invadida su propiedad de 70 hectáreas, por un comando armado de 100 personas.

Esa superficie de terreno, lo mantenía como reserva natural, para la protección y rescate de la flora y fauna selváticas, que consiguió una certificación de la Comisión Nacional de áreas Naturales Protegidas (Conanp).

A finales del año pasado, un grupo de 12 personas fueron aseguradas por la Policía Municipal, porque con armas largas y una corta, intentaron invadir un predio a orillas de la laguna, ubicado en el kilómetro 41, a pocos metros del centro de adiestramiento militar, Xtomoc.

Dentro de la ciudad también se han registrado invasión de predios, uno de ellos propiedad del ejido Bacalar, de aproximadamente una hectárea de superficie, que había donado a la iglesia para la construcción de una parroquia.

Sucedió lo mismo con un predio que formaba parte de la cancha deportiva de la escuela secundaria Ernesto Novelo y Novelo, donde permanece hasta ahora una persona que se acreditó como legítima propietaria.