Cancún.- “Todos aceptaron las reglas del proceso interno. Su renuncia es una decisión personal que no afecta al partido, pues es ella la que no se siente a gusto”, opinó Manuel Díaz Carvajal, dirigente del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el estado, en reacción a la salida de la ex gobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega, de este instituto político.
En su opinión, la ex candidata a la dirigencia no tenía por qué abandonar el partido, en especial porque durante el proceso se le preguntó si haría esto y dijo que no.
“No puedes decir una cosa y luego hacer otra. Eso es lo lamentable”, declaró el dirigente priista en Quintana Roo.
Negó que se pueda dar una salida masiva de militantes con esta renuncia, pues éste obedece a algún tema personal de la yucateca, “pero el partido seguirá adelante con su nueva dirigencia, para reposicionarse con la ciudadanía”.
Indicó que incluso si la elección de Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas era “bola cantada” por tener amplia preferencia entre los priistas, todo se realizó en un proceso con reglas que no fueron violadas.
Por otro lado, declaro que los ciudadanos continúan en espera de resultados en materia de seguridad.
“Si bien es cierto que toma tiempo establecer una estrategia, ya viene siento hora de que ya sintamos acciones”, comentó Díaz Carvajal.
Para el priista, hay una “sensible falta de seguridad que no se puede ocultar”, lo que perjudica la economía local, en especial por lo voluble del turismo ante cuadros de inseguridad.
