HUELGA DE HAMBRE

Madre inicia huelga de hambre para recuperar a su hija

Chetumal.- Hace casi un año, el padre la amagó con una pistola y le arrebató a la niña; la Fiscalía sólo le da largas.

Una mujer se declaró en huelga de hambre en Chetumal para exigir que la Fiscalía General del Estado atienda su denuncia en contra de su expareja quien hace un año le arrebató a su hija, Paulette N; de cuatro años de edad.

Yusdibia Juárez Martínez, oriunda de Sergio Butón Casas, explicó que el pasado 25 de diciembre su exesposo, Yonni N, se presentó en su hogar para golpearla y a punta de pistola le arrebató a la hija de ambos.

“Él junto con su hermano me sacaron de mi propia casa y me persiguieron por todo el pueblo: ellos a bordo de su camioneta y yo corriendo descalza. Una amiga me rescató y me trasladó a Chetumal, donde interpuse una demanda ante la Fiscalía General del Estado por violencia familiar y secuestro de mi hija”, cuenta la mujer.

Sin embargo, las autoridades hicieron caso omiso de su queja. En su lugar, la madre asegura que los agentes ministeriales le dieron largas señalando que el padre de su hija tenía derecho a llevársela, ignorando las pruebas que demostraban que ese día sufrió un ataque violento por parte de quien fuera su marido.

Yusdibia presentó similares denuncias ante la Procuraduría de la Defensa del Menor y La Familia, el Juzgado Oral Familiar, La Fiscalía de la Mujer, el Instituto Quintanarroense de la Mujer y la Comisión Estatal de Derechos Humanos, pero en ninguno de esos organismos resolvieron su caso.

“Siempre me dicen: ya la vamos a atender, sólo llene este formato o cuéntenos la historia. Lo hago, pero después me mandan a mi casa asegurándome que me llamarán cuando tengan algún avance, lo cual no ha sucedido hasta ahora”, platica entre lágrimas.

La mujer refiere que desde hace once meses no ve a su hija, y la familia de su expareja sólo le comenta que la menor se encuentra bien, pero se niegan a mostrarle fotos actuales o a proporcionarle un número de teléfono para hablar con ella.

“Hoy, 26 de noviembre, el notificador del Juzgado me llamó para decirme que no encuentran al ciudadano Yonni, por lo que se canceló mi audiencia prevista para este día. Por eso, me declaro en huelga de hambre aquí en el Congreso de Quintana Roo. Y si me quieren sacar, me voy a encadenar hasta que por fin me abran las puertas”, advirtió.

 

Inicia huelga de hambre afuera de un Bancomer, tras perder ahorros

Chetumal.- Una maestra de educación física que fue víctima de robo de identidad y de fraude inició una huelga de hambre desde ayer lunes afuera de una sucursal de Bancomer, institución bancaria que sigue sin resolver su situación y sin responderle, luego de que autorizaron que otra persona retirara dinero a su nombre.
“El banco admitió haber cometido un error jurídico; de ahí, me pasaron a otros teléfonos y de atención a clientes y de ahí me decían que no podían resolverme nada; una tal Yazmín Pérez usurpó mi nombre y con eso o mi número de teléfono retiró dinero y mi pensión”, expresó en entrevista la afectada, Elizabeth Alpuche.
Además, destaca la profesora, tiene pensión por invalidez permanente, luego de haber sufrido un accidente.
Tiene un seguro de vida que le fue otorgado por una aseguradora, porque por parte del gobierno aún no le entran nada aún.
“Me fracturé la cadera y tengo una prótesis total de cadera; el dictamen de los médicos fue pensión por invalidez total o permanente; abrí mi cuenta en Bancomer; tengo año y medio viviendo aquí, viví 40 años en Tijuana pero soy de aquí”, comentó la profesora.

EXIGE UNA EXPLICACIÓN
Fue en octubre cuando notó que su saldo bajó de manera drástica. Lo que le llamó la atención, pues ella no gasta tanto, y trata de que le sobre parte de su pensión cada mes.
“No sé quién se robó mi dinero, si fue el banco o quién, porque no conozco a ninguna Yazmín; yo soy Elizabeth Alpuche; ¿cómo pudieron sacar de ventanilla si ni siquiera yo saco de ventanilla? Solo voy al cajero y paso a mi tarjeta de débito lo que necesito”, lamentó.
Ayer se entrevistó con el gerente de Bancomer, quien le enseñó sus estados de cuenta para que reconociera los que eran sus movimientos, pero dice que casi no reconoce nada, pues son fuertes retiros de nueve mil, 15 mil o hasta 17 mil pesos, a veces hasta de manera diaria.
Incluso ni siquiera sabe cuánto es lo que han sustraído, pues le depositaron su aguinaldo en dos partes y su prima vacacional y no había hecho cuentas. Además de los aumentos que han recibido los maestros y a los que también ha tenido derecho. Pero son por lo menos 120 mil pesos.
“Si de por sí me está matando de hambre (el banco) voy a morir luchando”, sentenció.
La profesora concluye diciendo que espera que el banco se haga responsable por estos hechos y que continuará con su huelga, en una tienda de campaña bajo el sol a las afueras de una sucursal de Bancomer.